Fibra

Odio las galletas de fibra. No entiendo cómo una empresa puede enriquecerse a base de acelerar de forma superlativa, el tránsito intestinal de las personas. Estar cagando todo el día no es mi idea de salud, precisamente.
Pero hay ocasiones que se lo merecen. Que el país más desarrollado del planeta haga una fiesta nacional por el asesinato de un moro (que ellos mismos han entrenado en Afganistán) me impulsa a comer varias cajas de Flora Fibra (diosa, aunque sepan a mueble viejo) y ciscarme días seguidos en sus nombres, en sus jetas y en el padre que los engendró.
4 comments:
Consuma con moderacion.
No se vaya a desidratar.
=)
Pero querida, para eso los entrenan, para tener un enemigo bien preparado que les dé trabajo eliminar y así despues tener una excusa para hacer una fiesta. Es su día del orgullo quesuertetengodenosermoro.
muhahahaha yo también quiero tener un día del quésuertehetneíodenonaceryanki.
Lo mío con la fibra es una relación mal avenida...
La palabra Fibra, por sí mísma, me pone tenso...Aghhhh!
Saludos desde La Bellota!